¿Como ha podido un diseño tan básico de gafas de colores y materiales tan simples, mantenerse en lo más alto de la aceptación popular durante tantos años?
Quizás por eso, de tan sencillas que son, no suelen quedarle mal a nadie y lo más importante, el precio en su historia nunca ha sido muy caro, aunque para darles algo de renombre se las denomino tipo Teashades.
Estas gafas redondas, con montura de metal dorado y lentes de plástico de colores que recibió su máximo empujon con la estética hippie de los 60s, 70s y que se terminó de popularizar en todo el mundo gracias a John Lennon, no han sufrido variaciones sustanciales desde sus orígenes.
Al principio, las comunidades judías fabricaban sus monturas de pasta, pero muy pronto y gracias a la producción en pequeños talleres tipo comuna, se empezaron a fabricar en masa y llevar una de ellas era sinónimo de reaccionario y amante de la ruptura con todo lo establecido.
Yo os recomendaría, que si vais a usar este tipo de gafas, que tan de moda están esta temporada, os soltéis la melena despeinada y os pongáis vuestros vestidos más vaporosos y florales, ya que el estilo hippie vuelve, sobretodo con el calor que ya asoma del verano...
Nico
